La escolta tinerfeña Alba Peña regresó a su isla natal al inicio
de la temporada para incorporarse al Clarinos Ciudad de los
Adelantados. Este equipo ha realizado un gran trabajo que se ha visto
reflejado sobre el parqué en cada jornada. Como recompensa al esfuerzo,
entrega y dedicación el combinado lagunero ha hecho historia en el
baloncesto canario y, como premio, también ha alcanzado el deseado
billete que conduce a la Fase de Ascenso. Peña ofrece a Zona 2-3 su valoración sobre la campaña y comparte sus expectativas, haciendo énfasis a que se encuentra cómoda con su rol.
¿Cómo ha vivido su regreso a Tenerife
tras su etapa en León?
Ha sido una
vuelta a casa muy reconfortable. Sabía que iba a ser un buen año
deportivamente. Además, volver con los de siempre, a rodearme de las personas
que más quiero y más importantes para mí es de las cosas que también han hecho
que sea un regreso extraordinario.
¿Qué
motivos le impulsaron a incorporarte al Ciudad de los Adelantados?
Era un
equipo de mi tierra, donde me he criado y qué mejor que jugar en casa,
representando a tu isla. Era un proyecto interesante y con gente muy joven.
Además, conocía ya a muchos componentes del cuerpo técnico y fue algo que
también me impulsó a decidirme por el Ciudad de los Adelantados.
Personalmente,
¿qué destacaría del club? ¿Qué es lo mejor de jugar ahí?
Es un club
que se vuelca mucho en el equipo sénior y lo más importante es que cada
jugadora se sienta cómoda en lo que hace. Es un equipo de Tenerife en el que no
tengo que dejar nada de lado para poder jugar a baloncesto. Tengo a mi familia,
amigos, etc. y además puedo seguir estudiando mi carrera, Trabajo Social.
¿Qué
opina de la filosofía de juego de tu entrenador, Claudio García?
Destacaría
que siempre intenta sacar lo mejor de cada jugadora, nos pide mucha intensidad
y ritmo en los entrenamientos y nos motiva cada vez que es necesario. Creo que
son cosas muy importantes para llevar a un equipo y estar entre los primeros.
Durante
las diversas jornadas hemos apreciado una gran conexión entre las jugadoras del
equipo. ¿Cómo se consigue que haya un buen ambiente en el vestuario?
Sin duda
alguna, el buen rollo que tenemos lo transmitimos en la cancha. Para llegar a
donde hemos llegado esa conexión ha sido muy importante y hemos sido
conscientes de ello siempre. Además, como dije antes, somos un equipo joven y
nos entendemos bastante bien.
¿Cómo
se está sintiendo en el equipo?
Desde el
primer momento me he sentido muy bien. Me han puesto las cosas muy fáciles para
que siempre esté contenta. He tenido un rol muy importante, Claudio García y
todo el cuerpo técnico han depositado mucha confianza en mí. La verdad que, he
tenido semanas mejores o peores, pero siempre me han hecho ver que el equipo me
necesitaba.
En
general, ¿qué valoración realiza de la temporada y qué nota le pone?
Pienso que
hemos ido de menos a más y que ha sido una temporada bastante buena para un
equipo que el año pasado descendió. Al principio, al ser un equipo formado por
jugadoras que nunca habían jugado juntas se notó, pero poco a poco, con mucho
entrenamiento hemos ido evolucionando, conociéndonos y sabiendo la manera de
jugar de cada una. Al meternos en la fase hemos demostrado todo el esfuerzo
hecho a lo largo de la temporada. Pienso que un notable alto es una buena nota
para el equipo, siempre se puede dar más y hemos tenido errores que en su
momento no podíamos permitirnos.
Vimos un partido muy intenso en la última
jornada, donde se midieron ante el GDKO Ibaizabal en un duelo directo para
conseguir el billete a la fase. ¿Cómo lo vivió?
Partidos como
ese se viven con un plus de intensidad y ganas. Nos lo jugábamos todo y para
llevarnos la victoria teníamos que jugar en equipo y sabiendo en todo momento
que dependíamos de nosotras mismas. Por suerte, con 21 años he podido jugar
partidos muy importantes y sin duda, son los que más me gustan. También tengo
que decir que los nervios están siempre presentes en situaciones como esta,
pero son parte del juego y de partidos tan importantes como éste.
¿Cuáles
han sido las claves para acabar haciendo una temporada tan buena y clasificarse
para la Fase?
En mi
opinión, de las claves la más importante ha sido el ir conociéndonos poco a
poco, tanto dentro como fuera de la cancha y trabajar día a día, en cada
entrenamiento y partido. El equipo está compuesto por dos americanas, dos
senegalesas, una portuguesa, una gallega... y sin conocernos de nada, hemos
formado un grupo muy bueno y con unas ganas increíbles de llegar a lo más alto.
Los
primeros tres equipos de la clasificación nos pusieron las cosas muy difíciles:
Al-Qáceres, Araski e Ibaizabal. Siempre sabíamos que teníamos que salir con
todo a la cancha y a demostrar que nadie podía con nosotras, pero en partidos
como estos nuestra concentración tenía que ser mayor, porque sabíamos que estos
equipos iban a estar arriba. La verdad que no ha sido una temporada fácil, se
nos han complicado muchos partidos contra equipos que se encontraban más abajo
que nosotras en la clasificación, pero en todo momento hemos intentado darlo
todo y llevarnos la victoria.
Es
evidente que todos los clasificados son rivales duros y que la meta de ascender
es difícil por diversos motivos. Pero en el hipotético caso de que pudiera ser,
¿qué supondría para usted?
Disputar mi
segunda Fase de Ascenso a Liga 1, es algo que ya celebro. Son logros que llegan
después de mucho trabajo y muchas ganas, y te das cuenta que el esfuerzo tiene
resultados muy buenos como éste. Conseguir el ascenso con uno de los equipos de
mi isla sería algo fantástico y que me encantaría vivir. Estoy segura que algún
día el baloncesto femenino tinerfeño tendrá un equipo en la Liga Femenina, ser
partícipe de ello sería increíble y ahora mismo está en nuestras manos que esto
se cumpla.
Para
terminar, ¿qué mensaje te gustaría transmitirle a los seguidores del deporte
que le apoyan?
Solo puedo
decirles que muchísimas gracias por estar ahí apoyándome siempre y apoyarlos
para que sigan haciéndolo, porque sin ellos todo sería mucho más difícil.