Cuando Pau Gasol anunció que abandonaba la mítica franquicia de Los Angeles Lakers y con posteridad se supo que ficharía por Chicago Bulls, apareció un sector escéptico en la sociedad que dudaba que con 34 años pudiese seguir rindiendo a un alto nivel de juego. Incluso el mítico exjugador Shaquille O'Neal le dedicó unas controvertidas declaraciones en las que afirmaba que estaba “viejo y acabado”. Bajo el lema de a palabras necias oídos sordos, Gasol aterrizó en la franquicia de Jerry Reinsdorf ilusionado y decidido a demostrar con hechos a los aficionados del baloncesto de todo lo que puede a ser. Actualmente, se ha convertido en uno de los jugadores más destacados de su equipo y de la Conferencia Este.
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| Pau Gasol a punto de lanzar un tiro libre | Foto: Chicago Bulls |
El jugador catalán se ha adaptado al conjunto a la perfección y está contribuyendo al mismo de manera sorprendente. Los Bulls, que ya eran conscientes de sus habilidades, están todavía bendiciendo su llegada y dedicándole piropos a diario. Sin ir más lejos, el técnico Tom Thibodeau ha señalado que el ala-pívot es “el tipo de persona que es especial cuando se compromete con alguien”, mientras que su compañero de equipo Joakim Noah comentó recientemente que “es muy profesional y estable. Tiene una actitud positiva todos los días”. Lo cierto es que con la lesión de Derrick Rose -que continúa teniendo problemas en su rodilla izquierda y por eso se ha perdido varios choques en lo que llevan de temporada-, Gasol ha tomado un importante rol en el equipo hasta convertirse en la primera referencia de la plantilla.
Pero Pau posee un equilibrio emocional que le hace tener los pies en el suelo. No se le sube el éxito a la cabeza -como nunca ha ocurrido-. Esa inteligencia, unida a su afán de seguir creciendo en el deporte trabajando con esfuerzo, es uno de los factores que explican su elevado rendimiento en el terreno de juego. Esta campaña está firmando algunos de sus mejores números de su carrera en la NBA: ahora mismo lleva un promedio de 11.4 rebotes, 2.2 tapones, 82.7% de acierto en el tiro libre y 15.1 lanzamientos por partido; algo que nunca habíamos visto en su trayectoria en otros clubs. Es digno de encomio que siga demostrando esa vitalidad y progresión después de permanecer catorce años en activo en la máxima liga estadounidense.Además de ser el líder indiscutible de tapones y rebotes de los Chicago Bulls, también es el que mayor tiene eficiencia (22.4), es el segundo mejor anotador (después de Jimmy Butler, que acumula la cifra de 21 frente a los 18.7 de Pau Gasol), el segundo que más tiro realiza (solo Rose le supera con su marca de 15.7) y es el segundo con mejor porcentaje de tiros de campo (tiene 48.1% frente a los 50.6% de Taj Gibson). No conforme a destacar solo con su equipo, es el cuarto máximo taponador de la NBA, el quinto reboteador y el quinto que más dobles-dobles posee (20), el decimosexto que destaca por su eficiencia y el vigésimoprimero en anotación.
Ante el último encuentro contra los Milwaukee Bucks, Pau Gasol logró su mejor partido en anotación de su periplo estadounidense: alcanzó los 46 puntos, dejando en el olvido los 44 que alcanzó ante Seattle Supersonics en marzo de 2006 -cuando defendía los colores de Memphis Grizzlies-. Anotó 17 de 30 tiros de campo y 12 de 13 desde la línea de personal, lo que implicó en que se convirtiese en el primer jugador de los Bulls en conseguir 46 puntos y 18 rebotes desde que Michael Jordan logró 69 y 18 balones capturados bajo los aros en el partido que ganaron por 117-113 ante los Cavaliers de Cleveland, en marzo de 1990. Tras el encuentro, declaró ante los medios de comunicación que le importa más los resultados colectivos que el individual, aunque reconoció que a nadie le desagrada tal marca. “Haces los primeros tiros a canasta, los compañeros te buscan y me encontré en buena posición y con ritmo para seguir. Tengo que darle la gran parte del crédito a mis compañeros porque hicieron posible las jugadas y me buscaron durante todo el tiempo”, señaló. Sin duda, Gasol está en uno de sus mejores momentos a nivel profesional y en la mente de muchos surge la duda de hasta qué más puede llegar a hacer. El tiempo lo dirá. Por ahora, el cometido de Pau es hacer que su equipo obtenga los mejores resultados en la competición.
