Acabo de darme cuenta de que nunca he hablado del caso Watergate, tan relevante para el mundo periodístico. La investigación en este caso demostró que la perseverancia y el esfuerzo de la prensa de investigación puede ser capaz de forzar la dimisión de un presidente, en este casi Nixo, quien creyó que sus artimañas pasarían desapercibidas y quedarían amparadas por el poder político, sin recordar el peso que tiene el cuarto poder. ¿Quieres saber en qué consistió el escándalo Watergate?
El altercado tuvo inicio en junio de 1972 con el arresto de cinco hombres que habían accedido al hotel Watergate, situado en Washington, con el objeto de espiar al Comité Nacional Demócrata. En la madrugrada del 17 de junio del mismo año, Frank Wills, quien era guardia se seguridad del Complejo Watergate de edificios, informó que alguien había entrado en el edificio vulnerando los controles de entrada. Al localizar a los instrusos, decidió llamar a la Polícia, y fue de esta manera como los cinco hombres fueron arrestados dentro de la oficina del Comité Nacional del Partido
Demócrata, la sede del principal partido de la oposición ,tratando de
instalar equipos electrónicos de espionaje.
Conocidos popularmente como "los plomeros de Watergate" , los cinco arrestados resultaron ser miembros de la Operación 40 de la CIA, encargada de realizar operaciones terroristas contra Cuba. Su líder, James McCord, era el Director de seguridad del "Comité para la reelección de Nixon" ,además de ser empleado del FBI
y de la CIA, donde era la persona encargada de la seguridad física del Cuartel
General en Langley; mientras que los otros cuatro hombres eran agentes de la CIA.
Estas cinco personas fueron acusadas de intento de robo y de haber intentado intervenir en las comunicaciones citadas con anterioridad. Con el tiempo, se descubrió que fueron contratados y pagados secretamente por Howard Hunt, otro agente de la CIA, directivo y cabecilla de diversas operaciones contra
Cuba y preparativos de atentados contra el comandante Fidel Castro y Gordon Liddy, ambos vinculados al "Comité de Reelección del Presidente", es decir, el equipo de militantes del Partido Republicano construido por Richard Nixon para reforzar su campaña reeleccionista en las votaciones de noviembre de 1972.Las grabaciones de las conversaciones que tuvieron como escenario la oficina del presidente desde principios de 1971 se transformaron en una de las claves fundamentales del polémico escándalo.
Cuando el caso parecía cerrarse y caer en el olvido, Bob Woodward y Carl Bernstein, dos periodistas que trabajaban en el diario The Washington Post, que cabe destacar que fue uno de los más influyentes de ese país durante dicha época, revelaron detalles del asunto e imputaron al presidente de tratar de paralizar las investigaciones.
Ante la clara evidencia de espionaje,
se constituyó una comisión investigadora y casi todos los colaboradores de
Nixon renunciaron a sus cargos, envueltos en una red de sospechas que parecían no tener fin. A
partir de entonces, y durante dos años, fueron surgiendo cada vez más
elementos que comprometían la actuación de Nixon.
Tras numerosos incidentes judiciales ,la implicación de la
administración de Nixon se fue haciendo cada vez más evidente. Aunque al
principio se defendió negando tener conocimiento alguno del hecho del que se le acusaba, el 30 de abril de 1973, acabó aceptando parcialmente la responsabilidad del gobierno.Además, la existencia de unas cintas magnetofónicas incriminatorias del presidente y
su negativa a ponerlas a disposición de la justicia provocaron una dura oposición entre el poder ejecutivo y el judicial. La opinión pública
forzó, al final, a la entrega de esas cintas, pero uno fue sospechosamente alterada y
dos desaparecieron sin dejar rastro alguno.
Ante este contexto, los periodistas fueron orientados por un misterioso personaje al que
bautizaron como "garganta profunda" , que se encargó de conducirles al
descubrimiento el caso de espionaje en el que estaban implicadas las más
altas instancias del Estado y fue un hito en la investigación
periodística.
Nixon y su vicepresidente fueron reelegidos en el sufragio, pero el
escándalo no concluyó.
De hecho, las pruebas sobre sus culpabilidades fueron in crescendo hasta el punto de llevar a que se iniciaran los
procedimientos del juicio hacia Richard Milhous Nixon . Fue el 24 de julio de 1974 cuando la Corte Suprema
acusó al presidente de "obstruir las investigaciones judiciales",
"abuso de poder" ,"ultraje al Congreso y también de "haber utilizado a la CIA y el FBI con fines políticos". En agosto Nixon tuvo que entregar transcripciones de tres cintas magnetofónicas
que le vinculaban en el encubrimiento del escándalo. La
evidencia hizo que Nixon perdiera sus últimos apoyos en el Congreso.
El 8 de agosto
comunicó su renuncia al cargo de presidente al verificar que había
perdido la "base política" necesaria para gobernar. Su vicepresidente, Gerald Ford, accedió a la presidencia e inmediatamente otorgó un perdón incondicional a Nixon el 8 de septiembre de 1974.
*Imagen sacada de http://www.orangejuiceblog.com/wp-content/uploads/2010/08/nixon.jpg